A LOS MUCHÍSIMOS AMIGOS AMERICANISTAS Y NO AMERICANISTAS QUE ESCRIBIERON A MI CORREO Y A ESTA PÁGINA DESPUÉS DE HABER LEÍDO MI COLUMNA "TRISTEANDO":
Gracias por todo el cariño y sus palabras de aliento, me fortalecen cada día más al saber el aprecio que ustedes tienen por este viejo americanista.
A veces los dolores te quieren derrumbar pero estoy acostumbrado a luchar, así nací luchón en mi tierra y acá los grandes americanistas como Don Emilio, Don José, Don Guillermo y Pancho, me enseñaron que el dolor hace a los hombres más fuertes. También a pesar de los desengaños que tengo en el fútbol esos me hacen ser más americanista que nunca. Hoy ha sido un día especial en mi vida, me he dado cuenta de muchas cosas y le doy gracias a Dios por ser como soy. Me he dado cuenta que la incapacidad hace que la gente tenga miedo, gracias a Dios no soy uno de ellos. El cariño y los deseos de ustedes me hacen ser cada día más fuerte.
Estos grandes hombres me enseñaron que en el América la gente que tenía miedo no podía ser parte de la empresa y no podía haber gente que viera por sus propios intereses. Por ejemplo, un día le ganamos al Toluca 5 a 1, metí un gol y dí 4 pases de gol en la noche en el Azteca, estaba feliz en la regadera porque me iba a Acapulco, era jueves y en eso entra Jose Antonio Roca y me empieza a regañar horrible, para hacérselas corta, me enseñó una de las cosas más importantes de mi vida, me dijo gritándome y sin una sóla grosería delante de todos mis compañeros en el baño: "¡ESTO ES AMÉRICA!" y me lo repitió muchas veces, "¡NO REINOSO FUTBOL CLUB!"
Esto fué porque Don José pensó que yo había jugado para mi lucimiento personal.
Cómo han cambiado los tiempos, pareciera que lo que aprendí a muchos hoy en día les parece obsoleto y les incomoda lo que digo. Qué lástima que piensen así porque estos señores que les mencioné al principio me enseñaron que el América está por encima de los intereses personales.
También aprendí que lo que se promete se cumple, por eso firmé un contrato en blanco al señor Guillermo Cañedo después de haber sido elegido el mejor jugador de México con mi amado América. Con Don José y Don Guillermo aprendí que el América está por sobre todas las cosas y las personas.
Al América hay que quererlo como me enseñaron desde el primer día y eso mismo es lo que siento hasta el día de hoy.
Me enseñaron muchísimas cosas más que se las iré contando semana a semana.
Gracias, muchas gracias por el cariño que me dan.
¡AMÉRICA HASTA LA MUERTE Y DESPUÉS DE LA MUERTE TAMBIÉN!
CARLOS REINOSO
Gracias por todo el cariño y sus palabras de aliento, me fortalecen cada día más al saber el aprecio que ustedes tienen por este viejo americanista.
A veces los dolores te quieren derrumbar pero estoy acostumbrado a luchar, así nací luchón en mi tierra y acá los grandes americanistas como Don Emilio, Don José, Don Guillermo y Pancho, me enseñaron que el dolor hace a los hombres más fuertes. También a pesar de los desengaños que tengo en el fútbol esos me hacen ser más americanista que nunca. Hoy ha sido un día especial en mi vida, me he dado cuenta de muchas cosas y le doy gracias a Dios por ser como soy. Me he dado cuenta que la incapacidad hace que la gente tenga miedo, gracias a Dios no soy uno de ellos. El cariño y los deseos de ustedes me hacen ser cada día más fuerte.
Estos grandes hombres me enseñaron que en el América la gente que tenía miedo no podía ser parte de la empresa y no podía haber gente que viera por sus propios intereses. Por ejemplo, un día le ganamos al Toluca 5 a 1, metí un gol y dí 4 pases de gol en la noche en el Azteca, estaba feliz en la regadera porque me iba a Acapulco, era jueves y en eso entra Jose Antonio Roca y me empieza a regañar horrible, para hacérselas corta, me enseñó una de las cosas más importantes de mi vida, me dijo gritándome y sin una sóla grosería delante de todos mis compañeros en el baño: "¡ESTO ES AMÉRICA!" y me lo repitió muchas veces, "¡NO REINOSO FUTBOL CLUB!"
Esto fué porque Don José pensó que yo había jugado para mi lucimiento personal.
Cómo han cambiado los tiempos, pareciera que lo que aprendí a muchos hoy en día les parece obsoleto y les incomoda lo que digo. Qué lástima que piensen así porque estos señores que les mencioné al principio me enseñaron que el América está por encima de los intereses personales.
También aprendí que lo que se promete se cumple, por eso firmé un contrato en blanco al señor Guillermo Cañedo después de haber sido elegido el mejor jugador de México con mi amado América. Con Don José y Don Guillermo aprendí que el América está por sobre todas las cosas y las personas.
Al América hay que quererlo como me enseñaron desde el primer día y eso mismo es lo que siento hasta el día de hoy.
Me enseñaron muchísimas cosas más que se las iré contando semana a semana.
Gracias, muchas gracias por el cariño que me dan.
¡AMÉRICA HASTA LA MUERTE Y DESPUÉS DE LA MUERTE TAMBIÉN!
CARLOS REINOSO